En colaboración con Fundación Maior, ponemos a disposición esta antología. Los textos de San Agustín que la conforman, sacados de sus homilías, han sido escogidos y ordenados por Hans Urs von Balthasar.
En dichas homilías se manifiesta quién es San Agustín: un hombre de la Iglesia. Estas páginas no nos ofrecen la entera riqueza de su doctrina de la Iglesia, pero nos transmiten lo más vivo de ella, porque es lo que él nos trasmitió de un modo más inmediato. El santo siempre busca el único misterio de Dios, y siempre se deja encontrar por su realidad única y nueva.
Y aquí como obispo él predica, inculca, ilumina y explica ricamente a los humildes pescadores de Hipona –a los que Agustín se dirige en los términos de «Sanctitas vestra», su santidad, porque para él representan a la santa Iglesia católica– este único misterio: desde la especulación más alta sobre el cuerpo místico de Cristo hasta su sobria realización en el amor al prójimo en la vida diaria.
En colaboración con Fundación Maior, ponemos a disposición esta antología. Los textos de San Agustín que la conforman, sacados de sus homilías, han sido escogidos y ordenados por Hans Urs von Balthasar.
En dichas homilías se manifiesta quién es San Agustín: un hombre de la Iglesia. Estas páginas no nos ofrecen la entera riqueza de su doctrina de la Iglesia, pero nos transmiten lo más vivo de ella, porque es lo que él nos trasmitió de un modo más inmediato. El santo siempre busca el único misterio de Dios, y siempre se deja encontrar por su realidad única y nueva.
Y aquí como obispo él predica, inculca, ilumina y explica ricamente a los humildes pescadores de Hipona –a los que Agustín se dirige en los términos de «Sanctitas vestra», su santidad, porque para él representan a la santa Iglesia católica– este único misterio: desde la especulación más alta sobre el cuerpo místico de Cristo hasta su sobria realización en el amor al prójimo en la vida diaria.