«La pregunta ¿quién es un cristiano? acompaña a todos los ensayos de reforma de la Iglesia actual sin ser pensada ella misma en su raíz», afirma Hans Urs von Balthasar en el Preludio a este volumen, publicado por primera vez en 1965. Por una parte, se la presupone y se actúa como si ya se supiera y sólo restara adoptar las medidas prácticas necesarias. Por otra, se cree tener la libertad de denunciar como sospechosas de ideología las soluciones y pautas tradicionales del cristiano. La tarea es pasar de una «Dios detrás de nosotros» como lo proponen varias tendencias principales del cristianismo actual (Capítulo II) a un «Dios ante nosotros» como lo propone la «regula fidei» de hoy y de siempre (Capítulo III), como único medio para que el cristiano realmente se des-apropie de sí, asuma en sí a su Señor y cumpla su tarea en el mundo creado por el Padre (Capítulo IV).